Decenas de niños de 3º de Primaria de al menos ocho colegios de Zaragoza van a faltar esta semana a clase algunas horas para no participar en la prueba de evaluación individualizada. El rechazo a esta prueba ha crecido en los últimos días, tanto por parte de las familias como de los centros, que están obligados a hacerla. Todos los alumnos de 3º deben realizar tres exámenes esta semana: de Matemáticas, Lengua Castellana e Inglés. Los padres critican que es "un adelanto de la LOMCE", mientras que la DGA señala que es una prueba similar a la de diagnóstico que antes se hacía en 4º.
Los exámenes han comenzado este lunes en algunos centros y en otros empezarán este martes. En el primer día, en algunos colegios, como el Sáinz de Varanda, han faltado todos los alumnos de 3º. Durante el tiempo previsto para la prueba, han hecho otras actividades con padres fuera del centro.
Varios profesores consultados critican la prueba por contener "algunos contenidos inapropiados", por su extensión (80 minutos con un descanso), por no tener en cuenta la realidad social de los centros y porque hay "claros ejemplos de publicidad" en algunos de los problemas planteados.
Por ejemplo, en la prueba de Matemáticas se menciona a Cinesa Grancasa 3D en cuatro de los 25 problemas. Se da la cartelera de Grancasa y se hacen varias preguntas: "¿Qué películas podremos ver si hoy es martes y vamos a pasar solo la mañana en el centro comercial Grancasa? Rodea la letra de la respuesta correcta". "Si la recaudación con la película 'Maléfica' ha sido de 878.534 euros, podrías redondear esta cifra a las centenas, a las unidades de millar y a las centenas de millar". "Ubica en el plano del cine las butacas de Bob Esponja y Calamardo y tacha sus asientos".
"Es una publicidad clara y gratuita. Otros años no se ponían ejemplos así en la prueba de diagnóstico de 4º. El examen es una chapuza, se ha hecho muy rápido y sus resultados no nos van a servir. Hay preguntas que no son apropiadas: por ejemplo en 3º solo se ven números de hasta cinco cifras y en el examen se plantean con seis", apunta un profesor.
La prueba es la misma para todos los colegios. Los exámenes han sido realizados por profesores, por encargo del Departamento de Educación, y se enviaron a los colegios el mes pasado. Serán los propios centros los encargados de corregirlos. "Los resultados servirán a los centros para evaluar las competencias de sus alumnos y hacer planes de mejora. La DGA no va a hacer ningún ranquin de alumnos ni de colegios", aseguran desde el Departamento de Educación.
Padres y profesores critican que esta prueba es "antipedagógica" y "excluyente", y temen que los resultado se hagan públicos. En los colegios de menos de 35 alumnos, todos los niños están convocados a hacerla. En los centros con más alumnos, corresponde al equipo directivo elegir a los 35 seleccionados. La DGA no ha aclarado los criterios de selección.
"Hay profesores que se dedican a preparar la prueba para que sus alumnos saquen mejores resultados. Otros no, preferimos seguir con nuestro programa", afirma un profesor. "No tenemos garantía de que no se vaya a hacer un ranquin de centros. El consejero de Educación de Murcia ya ha dicho que en su comunidad lo harán. Son chicos muy pequeños para pasar estos exámenes. No se tiene en cuenta la evaluación continua ni la libertad de enseñanza de los profesores. Lo vemos como un ataque a la escuela pública, que es la que concentra la mayoría del alumnado con dificultades", critica un director.
La Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Aragón (FAPAR) considera que esta prueba es un adelanto de la LOMCE. "Es fruto de la precipitación y del empeño del gobierno nacional y de nuestro Departamento de Educación a nivel autonómico por aplicar una ley ideológica y sectaria, que busca la exclusión del alumnado, segregándolo en función de sus conocimientos", afirman.
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