NO QUIEREN ESCUELAS, QUIEREN EMPRESAS

El pasado día 27 de noviembre la consejería de educación de la DGA publicó el listado de actividades de formación reconocidas (es decir, cursos homologados) para este curso 20013-14. Y desde el sindicato de enseñanza de la CGT de Huesca comprobamos con estupor como NO se concedía el reconocimiento (la homologación) a dos de los cursos que habíamos presentado: las jornadas “Pensar la educación” y “La cara oculta de la modernidad”. Este último versa sobre como las enseñanzas que el estudio del Holocausto judío y la profundización en los valores que lo hicieron posible nos pueden ser muy útiles hoy, al poder servir como indicadores de los caminos que, como sociedad, no deberíamos seguir.

Y las jornadas “Pensar la educación” se centraban este año en la reflexión sobre el bilingüismo y sus modelos, pero también ha habido sesiones prácticas de geología y tecnología, repaso a la arquitectura racionalista, cine-fórum educativo,...

Pues bien, ninguno de los dos tiene aplicación práctica en el aula, según los criterios de la DGA. Sí la tiene, al parecer, un tercer curso, de cine contra el racismo, que también hemos realizado ya.

Pero es que repasando el listado de cursos que han obtenido el reconocimiento (o sea, que sí van a ser homologados) nos podemos hacer una idea de cuáles son las prioridades formativas de la administración y eso nos da pistas de que modelo de escuela y educación quieren.

Así, encontramos entidades como cámaras de comercio y entidades bancarias que ofrecen cursos como “Comercio electrónico”, “Empleo 2.0 :orientación vs. demanda empresarial.”, “Escuela financiera”, “Herramientas de coaching para educadores”, “Coaching y liderazgo en educación y formación”, “I Jornadas sobre coaching educativo”,...

La deriva que está llevando el mundo educativo a través de decisiones como éstas o la inefable ley de Wert no es inocente ni gratuita. El capitalismo actual necesita un modelo de trabajador/a determinado/a: barato/a, flexible, adaptable a las necesidades de un mercado cambiante e inestable, competitivo/a,... y para llegar a eso hay que empezar desde pequeñitos. Y para eso hay que utilizar la escuela.

La administración educativa aragonesa decía este año que uno de sus ejes prioriatarios de formación del profesorado era el bilingüismo. Y en eso hemos centrado este año las jornadas “Pensar la educación”. ¡Ah, calla! Que pone “pensar”, y no “coaching”. No vaya a ser que nos de por mirar con ojos críticos los PIBLEAs y otras veleidades bilingües de nuestras autoridades educativas. Da igual que llevemos ya seis años organizando estas jornadas y que las cinco anteriores sí hayan sido homologadas.

En fin, que en realidad somos conscientes de que a la mayoría de las personas que acuden a nuestros cursos no les interesan los “gallifantes”, no vienen por los créditos homologados. Y que estamos contentos/as formándonos como creemos que nos tenemos que formar y orgullosos/as de las respuestas del personal a nuestras propuestas.

El que debió de estar muy bien fue el de “Las fuerzas armadas españolas en el siglo XXI” que organizó la propia administración educativa en un CPR de Zaragoza.